Pon en práctica estas cinco formas de reducir el exceso de información al que estamos expuestos y que nos distrae y desenfoca permanentemente.
Nuestra atención es un recurso limitado que además es fundamental para realizar de manera eficiente las actividades diarias. Sin embargo, cada día estamos expuestos a una sobrecarga tal de información, a través de los diferentes medios de comunicación y la tecnología, que sino implementamos mecanismos para filtrar o reducir la cantidad de información que consumismos, puede llegar a afectar nuestra salud mental y nuestro bienestar.
Esta premisa es cierta frente a todo tipo de información, pero adquiere mayor relevancia cuando nos referimos a información que no nos agrega valor, nos distrae de lo que estamos haciendo y hasta drena nuestra energía. Así que, ante tantos insumos de información a los que estamos expuestos, establecer mecanismos que nos ayuden a filtrar lo que es bueno y lo que necesitamos se hacen cada vez más necesarios.
Y es que el exceso de información es una realidad cada vez más presente en la sociedad contemporánea. Con la proliferación del internet y las redes sociales, por un lado, la cantidad de datos y contenido disponible es abrumadora y, por el otro, la capacidad de digerir y analizar la información que recibimos se hace cada vez más compleja y retadora.
Esto puede tener varios efectos negativos en las personas, ya que las consecuencias de la sobrecarga informativa incluyen, entre otras, la disminución en la eficiencia laboral, la dilación o retaso en la toma de decisiones generada por la cantidad de insumos a considerar y nuestra capacidad para procesarlos, la dificultad para identificar fuentes confiables de información, la fragmentación de la atención, la dificultad para concentrarse en tareas importantes, la parálisis por análisis y el aumento en los niveles de ansiedad y estrés.
Por ello, aunque es difícil eliminar por completo el exceso de información al que estamos expuestos, sí está en nuestras manos reducirlo mediante la implementación de estas cinco buenas prácticas:
Silenciar los grupos de WhatsApp: participar en grupos de WhatsApp es una de las acciones que más distracciones nos puede generar debido al alto número de notificaciones que nos llegan, especialmente cuando son muy activos. Silenciarlos no significa que estés ignorando a los miembros del grupo, sino que te ayuda a reducir las interrupciones constantes, permitiéndote concentrarte en la actividad en la que estás trabajando, pudiendo revisar los mensajes cuando sea más conveniente para ti, en lugar de sentirte obligado a responder inmediatamente tras cada notificación. Esto contribuye, además, a disminuir el nivel de estrés por tener un entorno digital más tranquilo y menos agobiante, pues te permite interactuar con el contenido de una manera más controlada y a tu propio ritmo.
Limitar las notificaciones: limitar las notificaciones de las aplicaciones en el celular contribuye a tener una vida digital más equilibrada, productiva y saludable, permitiéndote tener un mayor control sobre tu tiempo y atención. Todas las aplicaciones que tenemos en el celular vienen con las notificaciones activadas por defecto. Así que tómate un momento y entra al módulo de configuración de las notificaciones de tu celular y desactiva las notificaciones de todas las aplicaciones que no sean esenciales para tu trabajo o tu vida – te aseguro que no son más de tres – y limita o reduce el número y motivos por los cuales esas aplicaciones pueden molestarte o interrumpirte durante tu jornada. Créeme que entre menos dejes activadas, mucho mejor, pues al no ser interrumpido constantemente, podrás gestionar mejor tu tiempo y dedicar momentos específicos para revisar y responder mensajes y notificaciones.
Utilizar los estados en el computador: los estados de concentración del computador son una herramienta eficaz para crear un entorno de trabajo más productivo, eficiente y menos estresante, y que ayuda a gestionar mejor el tiempo y la atención mientras trabajamos. Estos estados ayudan a minimizar las interrupciones y las notificaciones, permitiéndote concentrarte mejor y completar las tareas de una manera más eficiente, con un menor esfuerzo y una menor probabilidad de errores. Además, utilizar los estados de concentración puede ayudarte a desarrollar mejores hábitos de trabajo, como tomar descansos regulares y mantener un enfoque sostenido durante el trabajo, que son las bases de la técnica Pomodoro.
Controlar el uso del celular: todos los teléfonos inteligentes traen por defecto una funcionalidad que brinda información útil para hacer un mejor uso del celular. Según el sistema operativo, la funcionalidad que mejora nuestra higiene digital se denomina Tiempo en pantalla o Bienestar digital. Aprovecharla, no solo puede impactar positivamente nuestra salud física, mental y social, sino que también aumenta nuestra concentración y aumenta la productividad al reducir el número de interrupciones, evitando que atendamos el teléfono como si fuera nuestro jefe. Define entonces a qué aplicaciones les vas a poner límites en cuanto al momento del día y la cantidad de tiempo para utilizarlas, para que el consumo de información a manera de noticias, videos o redes sociales no te robe sin consciencia el tiempo que necesitas para hacer todo lo que quieres y debes hacer.
Bloquear los anuncios y ventanas emergentes: descarga una extensión de bloqueo de anuncios para Google Chrome, como Stands AdBlocker, para que disfrutes de una navegación por Internet más segura, sin anuncios ni ventanas emergentes. Esta acción puede mejorar significativamente la seguridad, privacidad, eficiencia y calidad de la navegación en tu computador, ya que los anuncios y ventanas emergentes te distraen de la información que realmente quieres ver y te hacen perder el foco ya que están diseñados para llamar tu atención. Además, estos anuncios ralentizan el tiempo de carga de las páginas web y hacen que pierdas más tiempo buscando la información que realmente necesitas, sin contar con que muchos de ellos incluyen rastreadores que recopilan información sobre tu comportamiento en línea para crear perfiles detallados y saturarte luego con mensajes de información relacionada con la que buscaste o consumiste.
Estas prácticas no solo te ayudarán a reducir el exceso de información de poco valor que te distrae, sino que también te serán muy útiles para vivir a tu propio ritmo y no al de los demás.
Cuéntame en los comentarios, qué otra estrategia utilizas para reducir o controlar la sobrecarga de información de poco valor que te bombardea diariamente.
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