top of page

¡Cómo va de rápido este año!

Foto del escritor: Juan P. LemaJuan P. Lema

Si eres de los que ha dicho “¡Cómo va de rápido este año!”, es porque necesitas vivir más experiencias que te acerquen a disfrutar más cada día.


Cómo va de rápido este año

A pesar de que todas las horas duran los mismos 60 minutos, no siempre parece que dudaran igual. ¿O no sientes que entre más adulto te haces, más rápido pasan los meses y los años? Y seguramente en algún momento también te has preguntado ¿por qué a veces se siente que el tiempo pasa tan rápido, mientras en otras ocasiones parece que el reloj se hubiera detenido? 


Esto se debe, entre otras, a la teoría de la dilatación del tiempo. Esta teoría indica que aunque dos periodos de tiempo duren lo mismo objetivamente, de manera subjetiva la sensación de su duración dependerá de qué estemos haciendo, qué estemos sintiendo y cómo lo estemos abordando.


Por un lado, emociones positivas, como la felicidad y la alegría, hacen que el tiempo pase muy rápido; mientras que emociones negativas, como el aburrimiento o el miedo, nos hacen sentir que el tiempo se detiene. Por el otro, lo que hoy nos parece que fue muy largo (como la espera en la fila del supermercado), en unos días no lo recordaremos tan largo porque no hubo nada significativo en ese momento; mientras que unas súper vacaciones que se nos van en un abrir y cerrar de ojos por la cantidad de emociones positivas que vivimos, tras unos años las seguimos recordando con cada uno de sus hechos y situaciones y ya no nos parecen tan cortas, por la gran cantidad de recuerdos que tenemos de ellas.


De allí la importancia de generar un equilibrio entre el tiempo real y el tiempo percibido, tanto en el corto como en el largo plazo. Equilibrio que, aunque no lo creas, depende de nosotros, ya que está en nuestras manos decidir qué tan rápido queremos sentir que pasa el tiempo. Y, seguramente, si estás viviendo esa vida que quieres y si estás haciendo todo aquello que amas, no querrás que tu tiempo pase volando.


CÓMO RALENTIZAR EL TIEMPO


Una de las razones para sentir que el tiempo pasa muy rápido, es vivir las horas y los días en piloto automático. Es decir, hacer las mismas cosas, de manera rutinaria, sin darle sensación de emoción o altibajos a nuestros días. Esto hace que un día sea igual al otro y que una semana sea idéntica a la otra. 


Reflexiona sobre tu propia rutina. En una semana en la que te levantas todos los días a la misma hora, tomas el mismo desayuno, te desplazas de la misma manera al trabajo, llenas tu agenda de las mismas reuniones, sales a la misma hora para tu casa, para sentarte a ver televisión o redes sociales en el mismo sillón, fácilmente podrías perder la noción entre si es miércoles o jueves, si es febrero o marzo, o si estás a principio o fin de mes. Pues todos los días serían iguales y sin nada novedoso para recordar. 


Y aunque las rutinas son muy buenas para evitar que nuestra mente tenga que pensar y tomar decisiones de poca importancia a cada momento, aplicadas en extremo pueden llevarnos a sentir que los límites del tiempo se desdibujan y que el tiempo pasa a toda prisa. 


Básicamente lo que pasa es que al permitir que todo lo hagamos en automático y de manera rutinaria los días son tan iguales que no tenemos como diferenciarlos en nuestra mente, pues no hay nada que nos haga recordarlos de una manera especial. Piensa por ejemplo en algo tan simple como el almuerzo. Seguramente los almuerzos de la mayoría de días de la semana pasada no los podrás recordar porque los tomaste sin nada que los hiciera memorables. Pero el almuerzo del día de tu boda o en el que celebraste un cumpleaños o el que sucedió en un gran restaurante lo tienes muy claro en tu memoria.


Por ello, es tan importante incluir de manera decidida en nuestras vidas hechos y experiencias que nos ayuden a ser conscientes de nuestro tiempo, de nuestra vida. Actividades que nos bajen del ritmo frenético de trabajo y nos ayuden a sentir que estamos viviendo una vida más plena y llena de significado. 


Otra forma de ralentizar el tiempo es haciendo algo nuevo o diferente. Por eso, aprovecha hoy mismo para bajarle la velocidad a este año y establecer en tu vida acciones y momentos que te ayuden a sentir que estás viviendo una vida más plena y más acorde con lo que tu quieres de ti. Estas son algunas preguntas que podrían ayudarte:


  • ¿Qué nueva receta te gustaría cocinar?

  • ¿Qué nuevo pasatiempo o arte te gustaría aprender?

  • ¿Qué nuevo libro te gustaría leer?

  • ¿Sobre qué tema te gustaría saber más?

  • ¿A qué concierto te gustaría ir?

  • ¿Qué pueblo o lugar cercano te gustaría visitar?

  • ¿A qué clase te gustaría asistir?

  • ¿Qué nuevo deporte o ejercicio te gustaría practicar?

  • ¿Qué podcast te gustaría escuchar?


Responde estas preguntas y fíjale a cada respuesta una fecha en el calendario para llevarla a cabo. Ojalá dentro de los próximos 30 días, para que no dilates la oportunidad de empezar a vivir cada día al máximo. Apenas llevamos unas pocas semanas de este nuevo año, así que estás muy a tiempo de poner el freno de mano y hacer que 2025 sea un año que no pase tan rápido y que además, quede impregnado de buenos momentos que te hagan recordarlo por mucho tiempo con alegría e ilusión.


Lo anterior no significa que la única forma de disminuir la velocidad del tiempo sea teniendo fechas especiales o haciendo algo novedoso todos los días. Esta fijación en la memoria se puede lograr estableciendo tres tipos de anclas, recomendadas por el médico y psicólogo Ali Abdaal, que nos hagan recordar momentos o situaciones más común y corrientes, y al mismo tiempo disfrutar más nuestras vidas: 


1. ANCLAS DE NOVEDAD


Incluye en tu jornada, de vez en cuando y tanto como puedas, acciones novedosas. Es decir, haz algo diferente en tu día a día de manera deliberada, cambiando tu rutina. Por ejemplo toma una ruta diferente para ir al trabajo, almuerza en un lugar diferente, siéntate en un lugar distinto, tomate un café con alguien con el que usualmente no converses, visita a tus padres un día diferente del que usualmente lo haces, sal a comer con tu pareja en una fecha inesperada sin una razón específica para hacerlo.


2. ANCLAS DE REFLEXIÓN


Lleva un diario en el que anotes aquello que hiciste cada día, tus mayores aprendizajes o logros, aquellos aspectos que no te gustaron. Sentarse a reflexionar sobre cada día vivido nos ayuda a grabarlo con fuerza en nuestra memoria y evitar que se olvide por falta de distinción. Si no me crees, trata de recordar todos y cada uno de los días que han pasado de este año. ¿Los recuerdas todos? Ahora, si no te gusta mucho escribir, tomar fotos y sentarte a verlas al final del día puede también ser una alternativa para que reflexiones sobre tus jornadas y puedas recordarlas con mayor precisión.


3. ANCLAS DE CONSCIENCIA PLENA


Medita, practica yoga, haz ejercicios de respiración y céntrate en el aquí y el ahora. Estos son también mecanismos que te ayudarán a establecer conexiones plenas con lo que estás viviendo, haciendo que los momentos se aferren más fuertemente a tu memoria y te den la sensación de que el tiempo pasa menos rápido y con más significado y sentido. Si esto no es lo tuyo, practica con cosas más simples como evitar la multitarea, salir a caminar por la naturaleza o pasar una hora lejos de tu teléfono. Seguro con cualquiera de ellas aumentarás tus niveles de atención plena.



Puedes ver lo fácil que es sentir que el tiempo no se va volando. De manera que no dejes que el trabajo ni la rutina te consuman y toma una simple acción para que este año sea más lento y vivas y disfrutes una mejor versión de ti.

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page